Reforma publica hoy que policías federales controlan el tráfico de cocaína en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), según declaraciones de dos implicados en el caso de los tres sobrecargos detenidos en diciembre en Madrid con 135 kilos de la droga. Además, empleados de la empresa de seguridad privada Eulen detenidos por presuntamente haber solapado a los sobrecargos de Aeroméxico, aseguran en declaraciones ministeriales que, por cada cargamento, los federales pagan alrededor de mil dólares a los encargados de vigilar el paso de maletas.
Jaime César Valencia, revisor de Eulen preso por una supuesta colaboración con policías y narcotraficantes, y Josafat Jonathan Guzmán, inspector de la misma compañía, declararon que los cruces de droga se realizan en un filtro de la Terminal 2 para funcionarios de alto nivel, diplomáticos y celebridades. Y fue justamente en ese punto por el que ingresaron a la sala de espera los sobrecargos de Aeroméxico Gerardo Zárate Álvarez, Luis Isbaal Avilés García y Eduardo Pérez Anaya, detenidos el 7 de diciembre en el Aeropuerto de Madrid-Barajas con los 135 kilos de cocaína.
Guzmán, el revisor de Eulen, era novio de Carmen Natalli Labastida, quien estaba a cargo de los rayos X en el filtro KP cuando los sobrecargos de Aeroméxico cruzaron. “Debido a que existen ciertos arreglos entre el personal de la empresa en donde ella labora y personal de la Policía Federal que está adscrita al AICM, es que (ella) dio el paso a estas personas para continuar con su destino. “Y me comentó que por dejar pasar, ya sea droga o dinero, les dan una cantidad aproximada de mil dólares por cada evento”, manifiesta Guzmán Rubio en la indagatoria PGR/SIEDO/UEIDCS/614/2010.
El inspector Valencia Martínez, por su parte, relató a la SIEDO que Carmen Natalli Labastida, actualmente prófuga, hablaba en voz alta con el personal de Eulen de sus actividades ilícitas e incluso invitaba a otros empleados a colaborar con los federales para llevarse una “lana” extra. “Ella le decía ‘mira, así se gana una lana‘, a lo que yo no accedí”, se asienta en la declaración. Tanto Guzmán como Valencia ofrecieron identificar a los federales implicados en las operaciones de narcotráfico, a pesar de lo cual la SIEDO no ha detenido, hasta el momento, a ningún elemento. “No sé sus nombres (de los policías implicados), pero sí los puedo identificar si los tengo a la vista”, indica Valencia.
Lea la nota completa en Reforma.