“Tienen que conciliar (integrantes de las bandas del crimen organizada), se oye muy mal esta frase, pero tienen que conciliar con el interés de los pueblos y las comunidades; no es fácil, pero en varios momentos ellos mismos han aceptado, cuando han tomado decisiones arbitrarias que afectan a la población que no tiene que ver, en todo caso, con la lucha que ellos están enfrentando con las autoridades federales”, fueron las declaraciones del Secretario de Gobierno de Michoacán, Rafael Melgoza Radillo, el pasado lunes 8 de agosto.
La preocupación en la víspera de la elección de candidatos para ocupar puestos en los 113 municipios, así como los 40 escaños del Congreso local y al sucesor de Leonel Godoy al frente del ejecutivo estatal, fue idear los mecanismos para “blindar” dicha selección de dinero procedente del narcotráfico o cualquier otra actividad ilícita.
No obstante, la dirigencia estatal del Partido Acción Nacional, en voz de su dirigente, Germán Tena, denunció que el crimen organizado está “poniendo cabezas” en los municipios, lo que no garantiza la elección (el próximo 13 de noviembre) de autoridades municipales sin relación con el narcotráfico, una fuente que pidió permanecer anónima, señaló que uno de los candidatos a gobernador fue “visitado” he informado de las condiciones en las que deberá llevar a cabo sus mítines de campaña en la zona de Tierra Caliente.
Aumentan delitos
Los delitos violentos han aumentado en toda la zona donde habrá elecciones, además que se han dado alrededor de 20 enfrentamientos desde el primero de enero y hasta agosto de 2011 entre el Ejército mexicano y presuntos integrantes del crimen organizado, según dieron a conocer autoridades castrenses de la 12 Región Militar, que comprende los estados de Querétaro Guanajuato y Michoacán, donde en el 2006, inició la llamada “Guerra contra el narcotráfico” con el “Operativo Conjunto Michoacán”.
A principios de este mes de agosto fue noticia el secuestro en Apatzingán, de nueve encuestadores y cinco empleados de la Sección Amarilla.
En marzo pasado, aparecieron en varios lugares de Michoacán mensajes escritos en mantas, en el que supuestamente un grupo denominado “Caballeros Templarios” se daba a conocer como sustituto del cártel de “La Familia” y ofrecían combatir el robo a casas, autos y comercios, así como “proteger” a los michoacanos de los secuestradores, violadores y extorsionadores.
La noche del pasado 8 de junio, fueron hallados 21 cuerpos en las inmediaciones de la capital del estado, junto a todas las víctimas había cartulinas en las que los acusaban de extorsionadores.
Los asesinatos han seguido desde entonces, y en muchos de los casos aparecen junto a cartulinas donde “informan a la sociedad de que fue ejecutado por extorsionador, ratero o violador”.
Los enfrentamientos armados entre propios integrantes del crimen organizado en Tierra Caliente, obligaron a los vecinos de las comunidades de El Terrero, Catalinas, Vicente Guerrero, Purépero y Pinzándaro, en los municipios de Apatzingán y Buena Vista Tomatlán, a refugiarse en albergues que el gobierno del estado habilitó tras el endurecimiento de los enfrentamientos.
Otra fuente que pidió no ser identificada, señaló que el desplazamiento de habitantes “se debió a los asesinatos que se hacían casa por casa al identificar la base social de cada grupo criminal”. “Llegaban a las viviendas y ni preguntaban, mataban a todos, en el pueblo todos se conocen y pues saben pa´cuál bando trabaja cada uno”, comenta un vecino.
La respuesta de las autoridades federales fue el incremento del número de militares, policías federales y de la Marina para el patrullaje de la región terracalenteña de Michoacán.
El pasado 11 de mayo, antes que se realizara un festejo del Día de las Madres, en la tenencia Felipe Carrillo Puerto, mejor conocida como La Ruana en el municipio de Buena Vista Tomatlán, se enfrentaron elementos federales y presuntos integrantes del crimen organizado. Después de una hora de tiroteo, se reportó la muerte de un presunto sicario apodado “El Chuche”. El festival alusivo al Día de las Madres, al que asistiría el edil Osvaldo Esquivel Lucatero y su esposa Leticia Larios, fue suspendido, de igual forma, el gobernador del estado Leonel Godoy Rangel, canceló la gira de trabajo que tenía programada para el 12 de mayo en la que inauguraría diversas obras en dicha comunidad.
En el municipio de Tiquicheo, el pasado primero de agosto, un comando armado irrumpió en las instalaciones de la dirección de Seguridad Pública municipal y se apoderaron de las armas existentes, además de llevarse consigo varias patrullas, esto ante la mirada atónita de los elementos de seguridad local, posteriormente, fueron instalados retenes en las inmediaciones del vecino contiguo de Huetamo, tras avisar que los criminales tomaron dicha dirección.
Lo que queda
Los habitantes del oriente seguirán pagando 500, 300 o mil pesos, según su actividad, para que puedan trabajar “tranquilamente”, quienes tienen aspiraciones a ocupar un cargo de elección popular deberán hacerlo, si de verdad lo desean, “sabiendo quién manda”. Los vecinos de Apatzingán, Buena Vista, Morelia, Aguililla, Lázaro Cárdenas, Puruándiro deberán seguir los protocolos de seguridad que ellos mismos han creado para evitar ser víctimas de los fuegos cruzados durante los enfrentamientos entre bandas criminales o entre estas y las autoridades.
Para los elementos de seguridad de primera fila, es decir, en los municipios, el trato con los cárteles que se imponen hegemónicamente ha dejado un saldo, en lo que va de la administración de Leonel Godoy Rangel, de más de 15 mandos policiales asesinados, además del atentado que sufrió la entonces Secretaria de Seguridad Pública, Minerva Bautista Gómez, del cual salió con vida pese a los más de 2 mil 800 disparos contra su camioneta y varias granadas de fragmentación.
El subsecretario de Seguridad Pública estatal, José Manuel Revueltas, fue muerto a sólo dos cuadras de la sede oficial de la SSP estatal, el 2 de septiembre de 2009, mientras que el coordinador de la Policía Estatal Preventiva, capitán Alfredo Yáñez Piñón fue atacado el 23 de octubre de 2010, en la autopista Morelia-Aeropuerto desde unas camionetas en movimiento, quitándole la vida.
El pasado 21 de mayo Jesús Mora Esquivel, subdirector de seguridad pública de Apatzingán, fue atacado por un convoy de hombres armados con armas de alto poder, resultando gravemente herido; el 23 de marzo asesinaron al director de Seguridad Pública de La Piedad, José Luis Guerrero Morales; el 18 de marzo de 2011, en el municipio costero de Lázaro Cárdenas, el jefe de custodios, Silvano Quirino García, fue ultimado de un tiro en la cabeza.
El 10 de marzo de este 2011, fecha en la que también “Los Caballeros Templarios” anunciaron su conformación, el director de Seguridad Pública de Santiago Tangamandapio, Jorge Hernández Espinoza, fue asesinado a bordo de su patrulla cuando transitaba por una brecha; anteriormente, el primero de marzo sobre la carretera Tanhuato-Yurécuaro, fue acribillado el director de Seguridad Pública Municipal de Tanhuato, José Gómez Basurto; mientras que el titular del área de SP del municipio de Taretan, Francisco Aparicio Méndez, fue interceptado el 6 de enero de este año, cuando circulaba con su familia, sobre la carretera Ziracuaretiro-Taretan y tras bajarlo de la unidad, fue muerto a balazos.
El segundo comandante de la policía municipal de Ziracuaretiro fue asesinado el 15 de octubre de 2010; el 8 de septiembre de ese mismo año, la oficial de policía Erika Vázquez Soto, secretaria del titular de Seguridad Pública de Lázaro Cárdenas, fue acribillada; en los límites del municipio de Tuzantla, el 30 de julio de ese mismo año, fue muerto el director de Seguridad Pública Municipal de Benito Juárez, César Negrón García.
El 16 de abril de 2010, fueron encontrados los cuerpos del director de Seguridad Pública de Hidalgo, Rafael Muñoz Rojas y el de su escolta. El mando policial que fue comisionado por la Policía Federal llegó a la plaza del municipio de Hidalgo, el 27 de noviembre de 2009, para reemplazar a otro mando que nunca llegó a su destino.
En el municipio lacustre de Quiroga, el 28 de enero de 2010, se identificaron a bordo de una patrulla, los cuerpos sin vida del director de seguridad pública municipal, Antonio Bravo Ramírez y los de sus dos escoltas; en Pátzcuaro, un grupo de sicarios acribilló acertándole más de 30 balazos al director de Seguridad Pública Municipal, Miguel Antonio González Zamudio, durante el ataque murió también un policía local y otro resultó herido; el 8 de febrero de 2008, el sargento de infantería con licencia, Cristóbal Juárez Malbáez, director de seguridad pública del municipio de Hidalgo, también perdió la vida.