Mientras se discute si el ataque zeta a Matamoros del pasado viernes fue un golpe deliberado contra la base principal del Cártel del Golfo o un intento para rescatar un grupo que cayó prisionero, la consultoría privada especializada en seguridad, Strategic Forecast (@Stratfor), destaca que ha estado esperando ver “este tipo de acción ofensiva” por parte de Los Zetas por meses, y advierte que la gente y los negocios deberían estar alertas por la probabilidad de un incremento en la violencia en los próximos meses en Matamoros, Reynosa y Monterrey.
Stratfor relata que alrededor de las 5 am del pasado viernes 17 de junio, según se reportó, se iniciaron enfrentamientos simultáneos entre elementos del Cártel del Golfo y Los Zetas en diversos lugares de Matamoros, Tamaulipas, una plaza en control de los primeros.
El Ejército mexicano confirmó que un tiroteo tuvo lugar en la colonia Pedro Moreno, pero no confirmó los reportes de algunos medios sobre enfrentamientos adicionales en los barrios de Mariano Matamoros, Valle Alto, Puerto Rico y la Sección 16. El Ejército tampoco confirmó un enfrentamiento reportado en el área rural de Cabra Pintas, donde seis soldados mexicanos fueron asesinados, según se afirmó.
Los detalles del enfrentamiento confirmado permanecen sin precisarse, pero a partir de todas las indicaciones, Stratfor afirma que un gran movimiento de elementos de Los Zetas hacia el interior de la plaza del cártel del Golfo sí ocurrió y sugiere un crecido ritmo en las operaciones de la guerra entre estos dos cárteles. En los siguientes meses, la violencia en aumento probablemente continuará en Reynosa, otra plaza del Golfo; en Monterrey, en control de Los Zetas; así como en Matamoros.
El Ejército mexicano afirmó que el enfrentamiento del 17 de junio en la colonia Pedro Moreno de Matamoros tuvo como resultado tres muertos y nueve detenidos, mientras un funcionario de seguridad estadounidense dijo que cuatro pistoleros del cártel del Golfo murieron en el tiroteo.
Stratfor afirma en su reporte semanal: “De acuerdo con un funcionario del Ejército mexicano citado en un medio de la zona (The Monitor) fronteriza, un regimiento motorizado de la armada mexicana patrullaba en camiones el centro de Matamoros cuando el enfrentamiento empezó, pero no tomó parte”.
Según la consultoría estadounidense, “el medio también citó a un funcionario de seguridad de EU, el cual confirmó la presencia de otro regimiento motorizado de soldados y afirmó que éste apoyó a Los Zetas en un intento de rescatar a once de sus operadores, hombres y mujeres, que fueron capturados por el Cártel del Golfo un día antes”.
Por su parte, el Ejército mexicano afirmó que otra unidad motorizada del ejército rescató a 17 civiles que habían sido secuestrados, a pesar de que es incierto cómo una unidad del Ejército pudo haber logrado esto sin ser parte de la operación o sin haber participado en el tiroteo. En algún punto durante la batalla, el líder de Los Zetas, Heriberto “El Lazca” Lazcano Lazcano, fue reportado muerto, aunque Stratfor duda que haya estado presente.
Mientras los reportes de “la batalla de Matamoros” se contradicen, es muy probable que un gran enfrentamiento sí haya ocurrido entre el Cártel del Golfo y Los Zetas y que éste haya sido iniciado por los últimos. Debido a la información contradictoria, Stratfor se declara incompetente para encontrar el móvil detrás de la incursión de Los Zetas, el cual según se reportó, implicó a una fuerza armada de 130 camionetas de este cártel. Sin embargo, hemos visto varios ataques por sorpresa de Los Zetas en los meses recientes para intentar disminuir la red de apoyo del Cártel del Golfo y este ataque sorpresivo en Matamoros ha sido el más grande hasta el momento.
El líder Zeta, “El Lazca”, un exmiembro del equipo de operaciones élite del Ejército, Grupo Aeromóvil de Fuerzas Especiales (GAFES), es un “viejo zeta”. Tiene un buen conocimiento táctico y de operaciones y ha probado ser muy racional en la toma de decisiones. Mover un convoy de 130 camionetas de casi 800 metros de largo (si es que iban pegados sus vehículos) dentro del corazón del territorio del Cártel del Golfo podría no conseguir el elemento sorpresa, pero significa que Lazcano probablemente pensó que esta fuerza era suficientemente grande para completar la misión incluso si eran detectados previamente.
Si el objetivo de este ataque era recuperar a los once zetas que, según se reportó, fueron capturados por las fuerzas del Golfo, aquellos prisioneros debieron ser extremadamente valiosos para Los Zetas y posiblemente para el mismo Lazcano. Los miembros de bajo rango de una organización, son típicamente poco valiosos como para realizar esta operación
Los reportes de que un regimiento motorizado del Ejército mexicano tomó parte en el enfrentamiento del lado de los sicarios de Los Zetas probablemente sean falsos. Mientras hay posibilidades de que algún elemento sea corrupto dentro del Ejército, la posibilidad de que un regimiento entero opere con los sicarios de un cártel es muy remota. No es inusual que algunos soldados y unidades militares más pequeñas trabajen para cárteles y posiblemente algún elemento trabajaba con Los Zetas, pero no pudo ser que lo haya hecho todo el regimiento militar, los cuales varian de mil a 3 mil soldados.