The Wall Street Journal advierte que existen temores de una crisis de liquidez en algunos gobiernos estatales mexicanos que están solicitando mayores préstamos y recurriendo a vencimientos de pagos más cortos.
El diario estadounidense explica que el monto de la deuda de los estados, de sólo un 2.3% de un producto interno bruto del país, no es la causa de la preocupación sino que los estados están comprometiendo grandes cantidades de sus ingresos futuros sin expandir su capacidad para recaudar fondos.
Agrega que los estados son reticentes a elevar los impuestos locales y dependen de las transferencias del gobierno federal para cubrir cerca del 90% de sus presupuestos
Además cada vez más, los bancos del sector privado están dispuestos a extenderles préstamos a corto plazo con vencimientos de menos de un año que no están respaldados por promesas de ingresos futuros.
Ante tal situación, Carlos Garza, titular de la unidad de coordinación con entidades federativas de la Secretaría de Hacienda de México y advirtió a los bancos privados que el gobierno federal no saldría al rescate si los gobiernos locales incumplen con sus obligaciones de deuda no garantizada.
Por su parte, Guillermo Babatz, presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores del país, señaló que la entidad que preside está trabajando en la elaboración de normas para los préstamos bancarios a gobiernos locales que deberían entrar en vigencia en 2012, que permitirían a los bancos evaluar mejor el riesgo de prestar dinero a estados y municipios.
Las cifras de la secretaría muestran que los estados y municipalidades debían 315 mil millones de pesos a finales de marzo, 112 mil millones de pesos más que en 2008. La mayor parte de esa deuda está garantizada por fondos que los gobiernos locales recibirán del gobierno federal.