El montaje televisivo alrededor de la detención de la francesa Florence Cassez realizado por Televisa en 2006, no influyó en su sentencia, pues el magistrado del tribunal responsable no los tomó en cuenta al advertir que fueron editado.
Un extracto de la sentencia del Séptimo Tribunal Colegiado en materia penal al que tuvo acceso Animal Político, señala que el magistrado, “al advertir que fueron editados no los tomó en cuenta para sustentar la sentencia reclamada; es decir, no fueron tomados en consideración ni en perjuicio, ni en beneficio de la quejosa… Además por esa misma razón también se estimó que no le causa agravio el que haya salido en las cámaras de televisión, ya que se reitera, las imagines ahí transmitidas no son las que sustentan la resolución impugnada en amparo.”
A decir del extracto, las pruebas que inculpan a la francesa, fueron las declaraciones de los testigos y los propios secuestrados, quienes dieron fe que Cassez había participado en los secuestros, al reconocer que en algunas ocasiones era quien les daba de comer, o les daba órdenes, incluso uno de los secuestrados refirió que fue ella quien lo anestesió para cortarle un dedo.
Ezequiel Elizalde Flores, por quien pedían dos millones de dólares a su padre, reconocío a Cassez, al indicar que la voz era la de una persona de aproximadamente 30 años, con acento extranjero, arrastraba la letra “r” al hablar y parecía de origen francés.
También señaló que era quien le daba de comer sándwiches, y al verla de frente, la vio cubierta con un pasamontañas y lentes oscuros, pero pudo reconocer a Florence Cassez “por la forma de su cuerpo, sus caderas, por ser muy delgada” y el cabello que salía por el pasamontañas era largo, teñido, “al parecer güero”.
Elizalde refiere en su declaración que Florence Cassez fue quien un día “le ordenó que saliera del cuarto, le dijo que cerrara los ojos, se los vendaron y comentó que le iban a mandar un regalito a su papá, le sujetaron la mano derecha a la espalda y en la izquierda sintió un piquete en el dedo meñique, la víctima pidió no dañaran su integridad, luego del ruego, lo tuvo sentado quince minutos, después lo volvió a su cuarto, sintió el brazo completamente dormido y la mujer le dijo que lo iba dejar allí para que pensara las cosas”.
Cristina Ríos y su hijo de once años también secuestrado, rindieron su primera declaración sin información relevante sobre Cassez, pero en la ampliación de la misma, la madre dijo que un día le sacaron sangre a su hijo y lo hizo una mujer con acento raro que no podía pronunciar la palabra “aprieta” y sus manos eran blancas y bonitas.
A las declaraciones que inculpan a Marie Louise Cassez Florence, se suma la de su coimplicado, Israel Vallarta Cisneros, mismo quien narró los secuestros de algunos extranjeros (dos argentinos), un menor de dieciocho años y además de los ya citados, y quien siempre trató de exculpar a la quejosa, pero dijo que ambos tenían tres meses viviendo en el rancho “Las Chinitas”, donde tenía una cabaña, y que el ocho de diciembre de 2005 fueron detenidos.
El montaje televisivo no fue determinante para la sentencia condenatoria de Florence Cassez, dado que los videos fueron desestimados por estar editados, por lo que queda sin valor uno de los argumentos de los defensores de Cassez.