El equipo del actual gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz, trabaja intensamente para eliminar cualquier documento o expediente que pudiera servir a su sucesor, Gabino Cué, para presentar denuncias por actos de corrupción o malversación de recursos públicos.
La orden de trabajo es no dejar prueba alguna que pudiera sustentar denuncias penales o, en su caso, para armar algún escándalo en los medios de comunicación.